Historia de la Salsa
Parte 1: La Palabra de un Hombre
En los años sesenta del siglo XX la música Latina sufría su primera gran crisis. Desplazada por la Beatlemanía, el Twist y la fiebre del Rock and Roll, daba la sensación de que nunca se iba a recobrar. Fue entonces cuando, como una de esas sorpresas que te da la vida, gracias a la imaginación de un solo hombre todo esto cambió.
Izzy Sanabria trabajaba como diseñador gráfico en los estudios de grabación Fania, en aquel entonces considerado la Motown Latina. También fue el maestro de ceremonias de la banda Fania All Stars y productor de la influyente revista Latin NY.
La gran sensación que causaron el Mambo y el Chachachá en el ámbito mundial hizo que toda una oleada de ritmos derivados de Cuba se fusionase con el Jazz. Sin embargo, las diferencias entre estos ritmos resultaban demasiado tenues, lo que los hacía prácticamente indistinguibles para los inexpertos. Esto generó gran confusión y provocó una inevitable fractura en el mercado. Fue como subirse al tren y que se le cayesen las ruedas.
Al observar la situación, Izzy se dio cuenta que era necesario reunir todos los ritmos bajo un mismo techo para así eliminar la confusión y vender el concepto más fácilmente. Decidió buscar una palabra que los describiese a todos, que capturase la imaginación de la gente e hiciese el mercado más sencillo. Eligió “Salsa”.
El hecho de que él tuviese único acceso a la palabra, tanto por escrito como de forma hablada resultó fundamental para conseguir la aceptación pública de “salsa”. Izzy usó salsa como una interjección mientras presentaba y para describir el género en la revista Latin NY. Su elección de la palabra no fue al azar, aunque ésta pierde bastante en la traducción al inglés: “sauce” o “saucy” no tienen el mismo efecto. La traducción más aproximada sería “kick it” o “punch it” (darle un empujón). Es lo que diríamos en música para animar a una banda a aumentar la energía de una actuación.
Sin embargo, no fue Izzy quien inventó la palabra. Hay evidencia del uso de la palabra “salsa” con anterioridad, como la despedida de Beny Moré: “Hola Salsa”, y la canción “Échale salsita” del Sexteto Habanero. Muchos musicólogos hacen referencia a la existencia de estos usos anteriores, pero no consiguen dejar claro por qué la eligió y con qué propósito.
El Jazz, un componente importante de salsa, revela sus raíces en los estados más al sur de América con palabras y frases derivadas de la cocina, como “smokin”, “jammin” y “now we're cookin” que los músicos exclamaban al alcanzar un momento cumbre en la actuación. “Salsa” no sería diferente. Sin embargo, soy de la opinión de que las exclamaciones en (el género que después se conocería como) salsa se usaban de una forma más estructurada. La música tiene determinadas propiedades generales: una introducción, una fase melódica, una fase de ritmo o percusión llamada montuno, una vuelta a la fase melódica y un final. Las exclamaciones se usan para anunciar cambios de fase, especialmente en el montuno, que es la sección con mayor energía rítmica. Las palabras más usadas son por ejemplo “candela”, “salsa”, “sabroso” y “azúcar”, esta última famosamente usada por Celia Cruz.
Por ello, cuando Izzy Sanabria eligió la palabra “salsa” como elemento de unión para todos los ritmos y (por implicación) sus respectivos bailes, ya existía como metáfora musical. Salsa era, y sigue siendo, una expresión de mayor energía y emoción.
Pero la definición de salsa sigue cambiando, un dinamismo que los estudiosos de este campo no logran abarcar. Se ha extendido hasta incluir música no Cubana y bailes como Cumbia y Merengue. Ha llegado a ser un símbolo de nacionalidad, creencia política e identidad cultural. Pero lo que resulta más fascinante es la rapidez a la que la definición esta cambiando.
El mundo es cada vez más pequeño. Cada vez más gente de países y culturas diferentes aceptan la salsa, y la adoptan como suya, dándole una nueva definición en el proceso con el fin de ajustarla a sus necesidades. Es un fenómeno conocido como internacionalización. Constantemente aparecen definiciones nuevas, se unen a otras, y son reabsorbidas en un proceso continuo. Hoy salsa es un término que fundamentalmente se define a sí mismo, lo que tiene una repercusión importante en el concepto de propiedad (que explicaré más adelante). Algo que Izzy no había planeado de ese modo según evidencian sus páginas web.
No hace falta decir que la idea funcionó, y que gracias a su esfuerzo la música Latina revivió. Fue cuando Fania All Stars actuó en el club Cheetah de Manhattan que se filmó con el título “Nuestra Cosa Latina”. El resurgimiento fue como un estampido que culminó en el famoso concierto en el estadio Yankee con 20.000 personas en 1973.
La historia no ha sido muy favorable a Izzy Sanabria. El foco de atención parece haberle pasado por alto para prestar más atención a gente más poderosa o atractiva. Quizá pienses que yo le doy demasiada importancia, pero creo que así compensa por los que no le han dado la suficiente. Y recuerda... sólo una palabra
Parte 2: Movimiento Hacia El Oeste
Canción y baile políticos
Nuestra historia comienza en la Francia anterior a la revolución bajo el reinado de Luis XIV, en la que el monarca había establecido el baile como mecanismo de control político. Para alcanzar un puesto alto en la sociedad y gozar de aceptación la nobleza tenía que saber los últimos pasos creados por su maestro de baile. Los bailes en la corte eran actividades de grupo, quizá para mostrar acuerdo con la voluntad del rey. Los nuevos pasos aparecían con mucha rapidez, con lo que la aristocracia no tenía otra opción que dejar a los miembros de su familia en Versalles para que pudieran aprenderlos. Estos familiares eran en efecto rehenes que brindaban a Luis XIV la oportunidad de controlar a la aristocracia.
El mismo rey era un entusiasta del baile y las joyas de su corona en cuanto a baile se refiere eran el minuet y la contradanse. Hay diversas opiniones sobre el origen del nombre contradanse: algunos opinan que proviene del Inglés “country dance” del cual desciende el baile (alrededor de 1710); otros optan por la opinión de que hace referencia a la formación observada en el baile, los hombres bailan en una línea enfrente de una línea de mujeres en “contra” danza.
En algunos de los bailes el hombre se situaba a la izquierda, y la mujer a su derecha. El hombre colocaba el brazo derecho en la espalda de la mujer para dirigirla y la mano izquierda sujetando la mano derecha de la mujer. Este parece haber sido el origen de la posición de baile que se encuentra en los derivados de la contradanse, en los que el brazo izquierdo de la persona que guía y el brazo derecho de la persona que sigue se mantiene en alto y hacia afuera de la pareja, mientras que el brazo derecho de la persona que guía rodea la cintura de la persona que sigue.
Desde Versalles la contradanse llegó a la corte Española donde recibió el nombre de “contradanza”. Desde aquí, ambos contradanse y contradanza llegaron al Caribe durante la colonización de América, concretamente a las islas de la Hispañola y Cuba.
Es importante destacar que ambas islas están divididas en dos partes: Hispañola estaba dividida políticamente entre el Saint Domingue Francés (hoy Haití) en el Oeste, y el Santo Domingo Español (hoy República Dominicana) en el Este. Cuba, que se sitúa al Oeste de Hispañola, esta dividida geográficamente. La administración colonial Española tenía sede en la Habana, al Oeste de la isla. La parte Este de Cuba recibía sencillamente el nombre de “Oriente” y resultaba más difícil gobernarla debido a las tierras pantanosas que separaban ambas partes.
La contradanse llegó a Saint Dominique y la contradanza a la Habana. Allí esperarían hasta la siguiente fase en el proceso de evolución de la salsa; el movimiento Africano.
Canción y baile religiosos
El mandato de la monarquía Española para el gobierno interior y la expansión exterior era la religión. La colonización, basada en la “humanización” de los Indios Americanos por medio de la conversión a la fe Católica, contaba con la aprobación del Vaticano. Además, España necesitaba la riqueza del Nuevo Mundo para sostener una economía resentida por la guerra contra los Daneses Protestantes. Era una posición que los monarcas se veían obligados mantener para poder conservar su derecho a gobernar. Sin embargo, los ingresos provenientes de las colonias disminuyeron. Los Indios Indígenas se morían de exhaustividad cuando ya muchos habían muerto víctimas de enfermedades propias del Viejo Mundo.
Los colonizadores Españoles los acusaban de vagos, pero los Indios, acostumbrados a la permuta de todo aquello que necesitaban, no podían comprender ni adaptarse a una economía basada en el trabajo. Por este motivo se comenzaron a importar esclavos para cubrir la mano de obra, hasta que llegó un punto en el que ya no quedaban Indios. Hay poca evidencia o estudio del legado Indio a la salsa, excepto quizá por las palabras “areito”, “Quisqueya” (como referencia a la Hispañola) y “Borinquen” (como referencia a Puerto Rico).
Las naciones colonizadoras Europeas establecieron puntos de caza de esclavos en la parte baja de la costa Oeste de África y la parte alta de la zona Este. No es completamente cierto que todos los comerciantes de hombres fuesen de raza blanca; tras la caída de los reinos Yoruba, los miembros de las tribus fueron vendidos como esclavos por tribus rivales. Fue así como los Yoruba y Bantu llegaron a la Hispañola y a Cuba. Ambos llevaron con ellos su religión y ritmos sagrados de tambores.
Por razones políticas, los Españoles tenían que demostrar una firme fe Católica, incluso entre sus esclavos. Las creencias religiosas de los Yoruba habían sido fuertemente reprimidas, pero lograron mantenerlas vivas. Hermanaron a sus dioses, Orishas, con Santos Católicos. Un ejemplo es el dios Chango, dios del fuego, la lujuria y la guerra, que fue hermanado con Santa Bárbara, lo que permitía a los esclavos decir a sus dueños: “Chango es el nombre Yoruba de Santa Bárbara”. Esta práctica, llamada sincretismo, dio como resultado la religión derivada Yoruba llamada Santería, que aún se practica hoy día. Se encuentran abundantes referencias al sincretismo en salsa, como por ejemplo la letra de la canción “Que viva Chango”.
Los compromisos económicos Españoles requerían mano de obra de alto rendimiento, lo que se traducía en largas jornadas de trabajo en el campo para los esclavos. Un esclavo Español tenía muy poca libertad social y religiosa comparado con un esclavo Francés. Como consecuencia, la tensión en Hispañola aumentó; la diferencia en el grado de libertad entre los esclavos de Saint Domingue y Santo Domingo provocó gran malestar. Los Españoles consideraban a los Franceses una amenaza para su base de poder político y económico. Ambas colonias se vieron envueltas en numerosas invasiones y conflictos brutales, generando una enemistad que dura hasta nuestros días.
La violencia provocó la emigración de colonizadores Franceses hacia el Occidente en dirección a Cuba, introduciendo y catalizando así la formación de nuevos ritmos en Cuba. Los inmigrantes se asentaron en Sierra Maestra, una cadena montañosa en el Oriente que rodea Santiago de Cuba. La ciudad de Santiago tiene la fama de haber sido la cuna de revoluciones políticas, sociales y musicales. La primera oleada llegó a finales del siglo XVIII, tras una serie de revueltas esclavas en Hispañola. Introdujeron la contradanza criolla, una versión criolla del contradanse, con influencia Africana en la instrumentación y la interpretación. Uno de los rasgos más prominentes fue la introducción de un ritmo sincopado de cinco golpes o “beats” llamado “cinquillo”. El cinquillo desempeñaría un papel importante en la música Latina que estaba por llegar. La segunda oleada de inmigrantes llegó a mediados del siglo XIX proveniente de la República de Haití, la cual contribuiría al nacimiento del Son Cubano.
Parte 3: El Movimiento Africano
No se puede calcular exactamente en qué medida Saint Domingue o Haití contribuyó al nacimiento de nuevos ritmos Cubanos, pero se estima que fue importante ya que los esclavos gozaban de más libertad para conservar su herencia cultural. Parece más que una mera coincidencia el que dos importantes revelaciones musicales emergiesen de Oriente al tiempo de la llegada de inmigrantes de Hispañola. Sin embargo, las condiciones en Cuba tenían que ser favorables para fomentar este desarrollo. Y lo eran. La distancia entre Sierra Maestra y la Habana brindaba a los negros más libertad para poder practicar sus costumbres en el Este.
La tradición vocal y los ritmos de tambores son una parte central en las prácticas religiosas y sociales de los Africanos. Un aspecto clave es la idea de musicalidad compartida, donde grupos de gente participan en una actividad de forma colectiva. Un buen ejemplo de esto son los ritmos de tambores en los que cada ritmo se identifica con un dios en particular
Unos de los músicos toca un ritmo específico y único; mientras que el grupo de tamborileros, llamado batería, tocan juntos formando un polirritmo. Cada parte del polirritmo puede ser compleja, y los tamborileros tocan en un ambiente de gran síncopa, con lo que resulta fácil perderse. El modo de que todos encuentren su lugar es sabiendo cómo el ritmo que están tocando encaja en un patrón maestro llamado “clave”. Mientras que la clave está presente los músicos están sincronizados y los polirritmos encajan. Funciona como un pegamento. El gran número de deidades Africanas exigía por tanto un gran número de polirritmos, lo que es fácil de conseguir, solamente alterando partes de algún polirritmo.
Los polirritmos Africanos son un componente esencial en la música salsa, y consecuentemente siguen una clave. Las claves más comunes son clave de son, clave de rumba, de samba y cua; todas descendientes de la clave Africana. El cinquillo (cinco golpes) y el tresillo (tres golpes) no son claves en sí mismas, sino motivos rítmicos que se ajustan a parte de una clave.
Un claro ejemplo de este tipo de cambios en el polirritmo en salsa es el chachachá, el cual se puede convertir en pachanga simplemente variando el ritmo de las congas, de “tumbao moderno” a “a caballo”. La diferencia es bastante tenue, y es comprensible que la gente encuentros los ritmos Latinos bastante confusos.
Otro legado proviene de las ceremonias religiosas donde los cantos son dirigidos por un líder social o religioso. Esto se conoce en la música Latina como coro - pregón; un cantante principal o solista al que responde un coro de forma alternativa. Los que no tocan los tambores también participan activamente en esta ceremonia golpeando el suelo con los pies, con las rodillas flexionadas para amortiguar el golpe. Como contrapunto a esta moción resultante se introduce el movimiento de las caderas, el cual, aunque bastante reducido, está presente en salsa.
Nota del autor:
En los años en que comenzaba a bailar, un amigo mío, Luis, me contó una anécdota que encierra el espíritu de la salsa. En aquel tiempo me costaba mantener el ritmo porque daba pasos demasiado grandes. Me describieron la salsa como un baile de esclavos. No podían dar pasos muy grandes por culpa de las cadenas que prendidas a sus tobillos impedían que escapasen. Por eso, cuando se reunían por las noches para bailar, sólo les quedaba una solución para hacer el baile más interesante: aumentar la velocidad del ritmo. Me quedé horrorizado, hasta que más tarde Luis me explicó que no estábamos haciendo una parodia de su desgracia, sino celebrando un fenómeno gracias al cual el sufrimiento se hacía soportable. Para un esclavo, el baile era la luz en su cruda existencia. No sé si la historia es cierta, espero que sí, porque aún siento el peso de sus palabras en las letras amargas y las dulces melodías de “El Preso” y “Rebelión”.
Parte 4: Cuba
El método de composición musical en la Cuba de la segunda mitad del siglo XIX variaba dependiendo de su situación geográfica. En el Oriente los músicos eran ambulantes; viajaban de pueblo en pueblo y raramente tenían un lugar fijo donde actuar. Estos trovadores llevaban una vida desarraigada y en ocasiones peligrosa, con lo que solían ser todos varones. Constituían una fuente importante de noticias y tenían un papel fundamental en la conservación del folclore. Sus instrumentos eran sencillos y fáciles de transportar: la guitarra, el tres - guitarra Cubana con tres pares de cuerdas; marímbula - piano Africano; botija - tambor de cerámica derivado de las jarras de aceite de oliva; y bongos. Su música consistía en una progresión rítmica de acordes sencillos, todo ello acompañando a unas letras improvisadas que obedecían la clave.
Estas características están presentes en salsa. La sección del montuno, la cual ocurre en las últimas fases de una canción, consiste en un ritmo de dos a cuatro acordes repetidos, llamado acompañamiento, sobre el que se ajustan las letras improvisadas. Esto recibe el nombre de inspiración. La habilidad de improvisación en la lírica se conoce como soneo. Los vocalistas son principalmente varones, incluso en el estribillo que en ocasiones se canta con un tono nasal alto conocido como “voz de madre vieja”. Es necesario mencionar también que la palabra montuno (montaña) deriva de un estilo rítmico llamado son-montuno que se originó en Sierra Maestra.
La música del Occidente era más Europea, más sosegada y los arreglos más elaborados. Los músicos gozaban de la posibilidad de actuar de forma regular en sitios concertados y con patrocinios consistentes. Los instrumentos eran caros y delicados comparados con los del Oriente, y aún recodaban a los encontrados en las orquestas Francesas. Esta conservación de la estructura orquestal, instrumentos y músicos especializados después facilitaría la entrada del Jazz en la música Cubana. Pero anterior a esto, existiría el pequeño aspecto de colisión y fusión de la música Europea y Africana.
El mayor salto en la evolución de la música y el baile vino cuando Cuba pasó a ser una colonia independiente en términos de identidad cultural y económica. Lo que antes era una diferencia geográfica entre Cuba Oriental y Occidental, se convirtió en una estratificación social en la capital: La música Europea para las clases altas de blancos y la música de Oriente para las clases bajas de negros. Situados en un nivel intermedio estaban los mulatos y las mulatas: mestizos o gente de ascendencia mixta. Aquí es donde se encontraba la verdadera acción.
Proceso de mestizaje
El estudio de la música étnica en el Caribe tuvo una influencia Europea hasta un momento tan reciente como son los años setenta (s. XX). Se mantenía que la introducción de ritmos e instrumentos Africanos en las orquestas había provocado el proceso de mestizaje. Con toda seguridad, el proceso ocurrió en ambos sentidos, pero el primero esta más documentado. La razón es sencilla; los primeros grupos suficientemente modernos y populares como para presentar un músico de color podían encontrarse fácilmente con el arresto de dicho músico, lo que generaba mucho papeleo. Tal fue la desafortunada suerte de un buen número de músicos de güiro en Puerto Rico en los años cincuenta del siglo XIX.
Lo que esta claro es que el proceso de mestizaje ocurrió y que no estaba localizado en Cuba. El uso del ritmo derivado de África, cinquillo, indicativo del mestizaje, estaba presente en todo el Caribe. Lo que pocos aprecian es la grandeza y continuidad del proceso. Tuvo su origen en las primeras relaciones entre colonizadores y nativos, y continúa hoy en día después de casi cinco siglos.
Música Cubana
El cinquillo Caribeño llegó a la danza y las habaneras Cubanas por medio de la contradanza criolla. La habanera viajó a Argentina donde se convertiría en precursora del tango. A finales del mismo siglo la danza evolucionó y dio lugar al danzón, que sería una de las dos formas de música y baile que más influirían en la música Latina del siglo XX.
Rebeca Mauleón describe de forma muy acertada la estructura del danzón en su libro La guía de salsa para piano y conjuntos (1993) y hace alusión al futuro significado de la otra forma: el son.
“El danzón consta de una introducción llamada "Paseo" (A), una melodía principal para flauta (B), una repetición de la introducción (A) y un trío de violín (C). Las innovaciones de varios compositores llevó a la adición de una cuarta sección (D) llamada nuevo ritmo, después conocido como mambo. Esta sección añadió elementos del son Cubano...”
Los bailes de estas formas musicales dejaron de ser actividades de grupo y pasaron a ser bailes de pareja. Hubo dos razones principales en el proceso: una fue la decadencia de la influencia Española en sus colonias como consecuencia de la invasión de Napoleón y la interrupción de sus rutas comerciales por parte de otras potencias coloniales rivales. La segunda razón fue un creciente sentido de identidad individual que trajeron el pensamiento y éxito capitalista. La independencia económica trajo una nueva confianza que redujo la necesidad de mostrar alianza a la madre patria.
La individualización del baile preparó el terreno para la introducción del movimiento Africano en los derivados de la contradanse. El mestizaje ocurrido en el baile fue mejor aceptado por comunidades de color que por la élite gobernante conservadora. Por ello, los bailes criollos se identificaron con un fenómeno de las clases bajas en toda Latinoamérica; el son en Cuba; el merengue y la bachata en la República Dominicana; el tango en Argentina; bomba y plena en Puerto Rico.
Antes de la revolución
La figura más importante en la política de Cuba de los años 1933 a 1959 fue Fulgencio Batista. Su estrecha relación con dos líderes políticos Americanos atrajo en gran medida el interés Estadounidense sobre el estado de la isla. Uno de ellos fue Summer Welles, embajador Estadounidense en Cuba y consejero del Presidente (F.D) Roosevelt, gracias al cual Cuba fue la beneficiaria de la política de Roosevelt “del buen vecino”, lo que abrió la puerta a grandes inversiones de compañías Estadounidenses. El otro fue Meyer Lansky, una figura clave en los sindicatos de crimen organizado. Gracias a este último, el submundo criminal estableció un gran número de hoteles y casinos en la Habana convirtiéndola en el “Las Vegas” Latino.
La influencia Americana y la conexión con Las Vegas en particular trajo actuaciones como Ginger Rogers y Frank Sinatra, lo que abrió camino para el próximo gran paso en la formación de la salsa... el Jazz.
El mambo pasó a ser reconocido como un género en sí mismo e independiente del danzón en los años cuarenta del siglo XX. Una aceleración en el ritmo del Jazz y un acercamiento al sonido metálico de Norteamérica distinguieron al mambo de su predecesor. De La Habana pronto se extendió a Méjico, Nueva York y Los Ángeles.
El Chachachá también descendió de la sección de nuevo ritmo incluido en el danzón. Sin embargo, al contrario que el mambo, todavía lo tocaban las charangas (flauta y violín) y conservó un tiempo medio. El gran cambio fue la introducción de la conga. (Para más información sobre este punto véase el artículo: “Chachachá: Clásica elegancia, clásico descaro”.
En ambas formas musicales, el chachachá y el mambo, se aprecia un acento en el segundo golpe o “beat” del ritmo. Esto es particularmente notable en el patrón rítmico básico de la conga, en el que el tono "slap" produce un sonido seco que coincide con el segundo golpe (o “beat”) de dicho patrón. Por esta razón, sus respectivos bailes comienzan en el golpe número dos.
Ambos estilos se extendieron rápidamente por el resto del mundo, comenzando un idilio con la música y el baile Latinoamericano; sobre el que aún hoy se apoya la popularidad de la salsa y el merengue.
Parte 5: La revolución
Cuba
Fidel Castro subió al poder en 1959. El constante deterioro en las relaciones hizo que los Estados Unidos estableciesen un embargo de comercio el día 8 de Julio de 1963 que constaba bajo el Decreto de Comercio con el Enemigo.
Esto tuvo una gran repercusión en la música Latina, ya que hasta entonces Cuba había estado en cabeza en cuanto a la creación de nuevos ritmos. Aunque el movimiento de gente y de ideas estaba restringido, el embargo no pudo impedir que se escapasen nuevos ritmos; los más notables siendo el songo y mozambique. Pero sí redujo la presencia Cubana en el escenario mundial; las últimas innovaciones de la música Cubana pasaban desapercibidas.
El artículo 9 (c) de la constitución Cubana de 1976 (reformada en 1992) garantizaba a todas las personas el acceso a la educación, las artes y el deporte de forma interesada. Hay financiación nacional para músicos y locales. Sólo podemos estimar la medida en que esto ha beneficiado a la música Cubana gracias a las palabras del conguero Daniel Ponce (1980):
“Cuando los Cubanos llegaron a Nueva York, todos dijeron: "¡Puaj! Esto es música vieja. Esperaba encontrar aquí un ambiente más latino; las letras, la composición, el sentimiento no son nada aventureros".”
Tres centros de salsa salieron a la luz: Nueva York, Miami y Colombia.
Nueva York
Los Nuyorquinos [emigrantes económicos que se asentaron en Nueva York provenientes de Puerto Rico] llevaron el testigo de la salsa durante el periodo de crisis que ésta sufría. Se abandonó la música folclórica Puertorriqueña como la bomba o la plena, quizá con la excepción de Willie Colón, en favor de la música Afro-Cubana. De hecho, se llegó a creer que la forma Cubana de tocar era la única. La situación resultante vio a los Nuyorquinos tocar una música que estaba fuera de su contexto cultural.
“Los Nuyorquinos son ajenos al folclore Afro-Cubano, particularmente a la música religiosa, y en ocasiones obtienen información de segunda mano de libros y grabaciones” - Charley Gerard.
Ellos definieron el sonido de Nueva York entonces y ahora; cimentando la influencia del Jazz y el R'n'B. La segunda generación de Puertorriqueños era bilingüe, y muchas de las canciones de la moda bugalú eran en Inglés. La proximidad entre los barrios Latinos y negros sigue favoreciendo el intercambio, asegurando de esta forma la relevancia de la salsa.
Miami
Los exiliados Cubanos de la revolución del 59 huyeron a la cercana Florida, a menos de 100 millas de distancia. Las circunstancias que rodearon su partida provocaron gran resentimiento en muchos de ellos y una actitud clamorosamente anti-Castrista. Muchos se establecieron en Miami, en una zona hoy conocida como “La pequeña Habana”. Caminando por la famosa Calle Ocho, uno no puede evitar sentirse sumergido en compases de salsa. Cada Marzo, dicho lugar se convierte en una explosión de música y baile; con el mundialmente conocido Carnaval de la Calle Ocho.
La Salsa en Miami esta relativamente politizada. El carnaval y el fomento de la salsa en Miami provienen en gran medida de un activismo político de derechas, hasta tal punto que los artistas con un mínimo vínculo con la Cuba de Castro no son invitados a actuar en el carnaval. Aquí, la salsa es un símbolo de deseo: el de una Cuba sin Castro.
Colombia
El auge en la importancia de la salsa en Colombia es una historia llena de luz y sombra. El tamaño y la geografía del país un día posibilitaron la acogida de poblaciones enteras de esclavos fugitivos; lo que sin duda contribuyó a la creación de una base musical única.
Lo que Fania hizo para Nueva York, Discos Fuentes lo hizo para toda Colombia. Pero a diferencia de la primera, que era como una isla en medio de un mar no Latino, salsa abarcó las ciudades de Cali, Medellín, Cartagena y Barranquilla. El gran peso del país como centro de salsa se puede ver en su gran contribución de talentos e innovaciones rítmicas.
Pero su éxito esta oscurecido por las drogas. El patrocinio (una antigua tradición Española) de bandas de salsa tenía una doble función: la de blanquear dinero y la de comprar una imagen respetable en la sociedad. Habría resultado muy difícil rechazar dichas contribuciones: si eres un cantante y tu fan número uno te compra un coche de regalo, ¿Qué vas a hacer? ¿Devolverlo?
Sin embargo, cualquiera que fuese el motivo, el blanco de estas inversiones era la base popular de la salsa; exactamente donde más la favorecería. Las bandas de salsa jóvenes y los directores de locales se encontraban con que tenían los recursos necesarios para promover sus actividades, lo que favoreció una mayor aceptación social de la salsa en Colombia.
Parte 6: ¿A quién pertenece la salsa?
Hay pocos temas que causen un debate tan apasionado como el del origen de la salsa. Todos claman tener la razón porque la salsa es parte de ellos. Que les pertenece. ¿Por qué pensamos de este modo?
Identidad cultural
Las relaciones entre europeos, africanos e indígenas naturalmente dieron lugar a un gran número de mestizos en el Caribe. Al principio, esta gente vivía en una especie de limbo cultural: rechazados por la élite blanca gobernante, y distanciándose ellos mismos de los esclavos negros debido a las condiciones tan precarias que estos sufrían. Pero a la vez que las colonias se apartaban de España debido al mestizaje, los mestizos pasaron a ser el prototipo cultural. Existe evidencia de esta idea: “[Manuel A., 1849] La mirada fija de Alonso imagina y crea una mujer Puertorriqueña -mestiza o mulata- que posee tanto una languidez europea como la sensualidad africana...” (Frances R. Aparicio), pero debería ser examinada en su contexto temporal; se había producido una feminización de la literatura y la música debido al dominio masculino de las artes. Aparicio explora más en detalle la asociación de la mujer blanca con la danza y la mulata con la plena. La mujer mestiza, y la música asociada con ella, llegó por tanto a simbolizar, al menos en parte, la cultura de las colonias. El uso popular de la palabra mulata como expresión en salsa contradice el papel de la música en la identidad cultural Latina. Refuerza el dominio masculino por medio de una feminización continua, y mantiene el ideal mestizo.
Salsa también simboliza el sueño de unidad Latinoamericana: el optimismo en la visión de Simón Bolívar de una Gran Colombia - una sola nación de gente unida; la realidad de una Latinoamérica que sufre la fragmentación, una anarquía continua, dificultad económica, inestabilidad política; la frustración de un potencial no realizado. Rubén Blades hace alusión a este sueño en un breve comentario en su álbum en directo con Son del Solar. Salsa es la prueba de las cosas tan magníficas que los Latinoamericanos son capaces de hacer. Es la identidad musical de la Gran Colombia.
Los Españoles Europeos también claman la propiedad de la salsa ante los no Latinos, basados en la razón de compartir un mismo idioma. Sin embargo, los Latinoamericanos no conceden a los Españoles tal derecho, dadas sus diferencias en el pasado. En este punto, la identidad cultural comienza a mezclarse con identidad nacional.
Identidad nacional
El uso de la salsa como símbolo de identidad nacional se puede atribuir a dos factores principales: la pérdida de soberanía nacional tras la intervención de los Estados Unidos y la relativa incompetencia de las tropas Estadounidenses en el baile.
Mientras que la Doctrina Monroe de 1823 limitaba la influencia Europea en las Américas, el Corolario Roosevelt de la Doctrina (1904) planeaba justificar la intervención Estadounidense en el Hemisferio Occidental. Esto dio paso a una serie de invasiones militares Estadounidenses a lo largo de toda la cuenca del Caribe con el fin de proteger sus intereses políticos y económicos. Los Latinoamericanos se aferraron a su música y baile como forma de resistencia cultural.
Como ejemplo, la ocupación Estadounidense de la República Dominicana (1916-1924) generó gran resentimiento y empujó a los Dominicanos a adoptar la variante de Merengue Cibaeño como forma de defensa. Sin embargo:
“La creatividad Dominicana engendró no sólo ligeros y delicados merengues que los torpes invasores Norteamericanos no podían seguir, sino también una nueva forma expresiva derivada de la incompetencia de los marinos” (Paul Austerlitz)
Posiblemente, debido al punto hasta el que se empleó, el merengue sea el ejemplo más extremo de música y baile como forma de identidad cultural. Seis años más tarde, el dictador Dominicano Rafael Trujillo usó el merengue como base de su campaña presidencial y lo promovió incesantemente durante su estancia en el poder.
Identidad Política
'“Guarda La Habana para mañana” es el eslogan de los Cubanos de Miami que ni quieren ni volverán a la Cuba revolucionaria de Castro. Mantienen una actitud enérgica en la protección de “su” música, la cual consideran anterior a la revolución y símbolo de las cosas buenas previas a Castro. En su opinión, la Cuba revolucionaria no tiene derecho de propiedad, y mantienen una postura apática con el fin de negar cualquier indicio de legitimidad.
Por el contrario, la salsa -como la poderosa figura del Che Guevara-, ha sido adoptada por movimientos socialistas en el extranjero. La Cuba socialista encierra una serie de valores que la convierten en un sueño mercantil: buenas estadísticas en salud, educación y cultura; opresión por un gobierno imperialista externo; subversión por grupos militantes de derechas. El origen de la salsa como música de las clases bajas y su aceptación posterior favorecida por la desaparición de la estructura de clases la convierten en la herramienta perfecta para promover la ideología socialista.
Pero la cuestión sobre la propiedad no ha sido nunca tan disputada como entre Cubanos y Nuyorquinos. Para los Nuyorquinos, salsa es un término creado por ellos; una música que ellos mantuvieron viva cuando Cuba perdió ímpetu. Fue por medio de su esfuerzo: el nombre musical de Fania y RMM; las emisoras de radio y los clubs; y las actuaciones las que mantuvieron viva la salsa.
Para el Cubano, la palabra salsa es un término creado para disfrazar el verdadero origen Cubano de la música, para negar su derecho de propiedad. Solía suceder, que las marcas de música Americanas grababan canciones de compositores Cubanos sin atribuírselas realmente, usando en su lugar las iniciales D.R. (Derechos Reservados). Según dice Charley Gerrard (1998):
“El plan era que, debido a la ruptura en las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, los compositores recibieran el dinero que les pertenecía en cuanto las relaciones entre ambos países se restablecieran. Como resultado, el público general no fue consciente de la cantidad de material de compositores Cubanos que los artistas de Fania estaban grabando.”
El fracaso de RMM a causa del impago de derechos de autor hace dudar de este argumento, e insinúa una corrupción similar a la del régimen de Batista.
Perspectiva: Propiedad y posesión
Existen dos definiciones muy interesantes del término propiedad: 1) derecho exclusivo de posesión, 2) posesión con derecho a transferir dicha posesión a otros. Ambas implican posesión y el derecho sobre ella.
Si existe una palabra capaz de describir el génesis de la salsa, esa es “mestizaje”. El término hibridación es demasiado estéril; esta desprovisto de las connotaciones raciales y culturales que encierra el término mestizaje.
Dada la diversidad en el linaje de la salsa, ¿Cómo podemos decir que el mestizo pertenece a un grupo determinado? Si la inclusión ha sido su patrimonio, ¿Qué posible beneficio puede aportar una posesión exclusiva?
La internacionalización y adaptación local dentro de cada país lo hace aún más difícil. Quizá no ahora mismo, pero pronto, la salsa no será percibida como propiedad de los Latinoamericanos. Salsa ya significa diferentes cosas en diferentes sitios - aunque sigue siendo la misma palabra. Es forzoso decir que nadie es el propietario de la salsa, pero al menos todos podemos poseerla; todos y cada uno de nosotros.
En su nivel más elemental, si es el individuo el que define la salsa, ¿Cómo podemos estar seguros de que tu definición de salsa es la misma que la mía? En lugar de decirte lo que debes creer, sería mejor que ambos intentásemos entender todo lo que salsa podría ser. Y si eligiésemos dedicar una buena parte de nuestras vidas a ese fin y parte de nuestro tiempo para conseguirlo, nos daríamos cuenta de que es la salsa la que al final es nuestra propietaria, y no al revés.
Para parafrasear un dicho aborigen: “¡Qué arrogante es el hombre que se cree dueño de una montaña, cuando la montaña seguirá ahí aún cuando él y sus hijos ya no estén!”.
Parte 7: Salsa en el Reino Unido
Los Británicos no son ajenos al baile Latino. A raíz de la era del mambo y del chachachá se desarrolló toda una industria de la enseñanza con el fin de saciar el ansia de dominio de las pistas de baile en todos los salones. Pero la salsa, según la conocemos hoy, llegó a estas costas bajo la forma de Fania All Stars en 1976 con una variedad de bandas Cubanas, incluyendo Irakere, que tocaban en el club de Jazz de Ronnie Scott en el despertar de los años ochenta.
Los Latinoamericanos
Los Chilenos huían de Augusto Pinochet y vinieron al Reino Unido buscando refugio. Con ellos trajeron su predilección por la Cumbia Colombiana. Los Cubanos, por su parte, saltaron del avión en su camino a la U.R.S.S. aprovechando una parada en Irlanda y buscaron asilo político. Se establecieron, al menos en un principio, en el este de Inglaterra, en ciudades como Manchester. Los Colombianos vinieron principalmente a Londres como inmigrantes económicos durante el comienzo de los años ochenta, cuando las normas de inmigración no eran muy estrictas y se acogieron a puestos vacantes en industrias del sector servicios.
Cuando el público general empezó a ser consciente del fenómeno salsa, ya se habían establecido firmemente dos comunidades de baile diferentes: La Colombiana y la Cubana. La creciente aceptación de que gozó la salsa y la correspondiente demanda de clases provocó que ambos grupos rivalizaran por dominar el mercado.
Entrar en: UKA.
Alianza del Reino Unido (UKA) de Profesores Profesionales de baile y artes análogasLa práctica del baile internacional de salón y Latino según el código Británico se encontraba en pleno declive. Al igual que con la salsa en su etapa más débil, comenzó por la sustitución de bailes en pareja por baile individual, comenzando con el “twist”.
El norte de Inglaterra pasaba por una mala etapa económica y los clubs de trabajadores, que una vez habían sido los cimientos del baile de salón, tenían cada vez menos gente. Su capital, Blackpool, todavía hoy base de la UKA, adquirió fama de cursi y esta idea pasó a asociarse a la actividad.
Aunque el lado competitivo del baile de salón aún gozaba de buena aceptación, la gran atención que atraía (con programas como “Ven a Bailar”) en combinación con un enfoque tradicionalista en su presentación hacía que resultase difícil para el público relacionarse con él. Por último, la resistencia de la “fraternidad” del baile de salón hacia la modernización los desplazó a una posición marginal.
Para ir en contra de la tendencia, la UKA formó una división de club de baile y encargó a dos de sus miembros; Paul Bottomer y Paul Harris que “desarrollaran” material instructivo para tango Argentino y salsa respectivamente. El currículum resultante seguía el patrón de enseñanza de la UKA, dando a los estudios de baile afiliados acceso instantáneo a ambos mercados. El currículum seguía el estilo Cubano y fue ratificado a su vez por reconocidos profesores Cubanos.
Las razones que UKA hizo públicas para justificar su medida fueron: reconocer la existencia de una significante forma de baile y de las personas que contribuyeron a su desarrollo aquí; proporcionar un patrón en calidad de enseñanza; aumentar la seguridad; e introducir un seguro de daño personal. Hasta ahora ha tenido poco éxito: un buen número de profesores sigue prestando oídos sordos al reconocimiento de la UKA; el sistema de educación es arcaico comparado con las ciencias del deporte; la atención prestada a la seguridad deja mucho que desear, y el reconocimiento de la necesidad de un seguro es aún minúscula.
Beneficios para profesores
Un profesor recién afiliado se beneficia de poseer una credencial reconocida en toda la Mancomunidad Británica establecida durante la época colonial. Un argumento que asegura el reconocimiento de profesores que pretenden trabajar fuera de la frontera nacional. Para los que ya están afiliados, proporciona a los estudios de baile de salón la oportunidad de volver a seguir la corriente dominante en la cultura de baile después de estar descolgados durante un tiempo.
En ambos casos, también existe el incentivo económico de ofrecer medallas de examen y test para evaluar el nivel de competencia. Los beneficios se reparten entre el estudio de baile por aportar el local y el estudiante, y el cuerpo de emisión por aportar el examinador.
Impacto general
La red nacional de estudios de baile de la UKA hace posible que la gente sea más consciente de la salsa y tenga mejor acceso a ella incluso en áreas donde no existen comunidades Latinas. Sin embargo, hay una mosca en la sopa; la salsa que se enseña en los estudios de baile de salón esta basada en rutinas y no siempre se corresponde con la salsa encontrada en las pistas de baile. Se puede apreciar un cierto "mestizaje" en el proceso de producción del currículum de la salsa cuando el contenido se adaptó al método de enseñanza de la UKA.
Dejando el tema de la autenticidad a un lado, es cierto que existen variaciones en los niveles de enseñanza e interpretación del currículum, abarcando desde lo completamente práctico a lo inaplicable.
Algo que la UKA ha logrado conseguir es mantener el interés por las competiciones de baile, un área que siempre ha sido su punto fuerte. Las competiciones se están convirtiendo en un canal de entrada para nuevos profesores al mundo de la salsa, siguiendo la creencia popular de que los mejores bailarines son también los mejores profesores.
Perspectiva: Estado del Arte
Salsa en el Reino Unido se concibe bajo una perspectiva de despliegue social, para el disfrute de tanto los espectadores como la pareja. Por este motivo se presta especial interés a combinaciones de giros y adornos; que impiden al bailarín medio aventurarse en cuanto al uso del ritmo, y lo dejan demasiado atado a la mecánica de una combinación como para ser expresivo a la música.
Al contrario que en los centros de salsa más importantes, la comunidad Latina en el Reino Unido no es lo suficientemente grande como para poder aportar una considerable cantidad de músicos que puedan definir un sonido indígena Británico propio. La música en directo es poco frecuente, y se crea así una extraña disociación de la música. Prueba de ello es la falta de atención que los instructores prestan al ritmo, y la poca interacción entre bailarines y músicos en actuaciones en directo. Del mismo modo, no se expresa mayor preferencia por la música en vivo que por la música sacada directamente de una lata.
La enseñanza de la salsa esta basada en el léxico y hace muy poco énfasis en aspectos como la habilidad en pareja, música o “marcas” (aspecto de guiar o seguir). El currículum de la UKA encaja perfectamente con esta idea, y por tanto se centra en figuras básicas de baile. Sin embargo, apenas hace referencia a aspectos relacionados con la educación física y que tienen una gran importancia, ignorando de este modo los gigantescos avances que han ocurrido en dicho campo. Del mismo modo, sorprende en aún mayor medida el hecho de que se centra en un estilo Cubano, con lo que deja consecuentemente de lado cualquier definición sustancial o comparación con otros estilos.
Quizá el resultado a largo plazo de haber codificado el currículum de salsa a un texto puro y duro sea una aceleración en el proceso de internacionalización en países donde la UKA esta presente, y contribuir a su longevidad como ocurrió con el chachachá. Puede incluso resultar en la mayor contribución del Reino Unido al mundo de la salsa. Pero si la historia se repite, la salsa según la UKA permanecerá estancada en el año 1998 - el año de inscripción, mientras que el resto de las corrientes de salsa seguirán evolucionando. Es lo que sucedió con el chachachá.
La experiencia nos dice que son los cambios en el baile los que siguen cambios en la música, y no al revés. El Reino Unido es como una colonia en cuanto a salsa se refiere que depende culturalmente de los centros más importantes, como son Cuba, Nueva York, Colombia e incluso Los Ángeles. Se está produciendo un mestizaje o una fusión respecto al baile de salsa, pero la falta de identidad musical específica le impide jugar un papel más importante en el escenario mundial.
FUENTE:
www.plataforma.uchile.cl